Escucho el reloj, son las 6am, me
siento tan lejos de donde he estado. Hago un par de huevos, unos
panqueques, un poco de maple, tengo
todo, excepto a ti.
Me he enamorado, talvez lo he
estado siempre, pero se que no serás nunca para mi, tu entregaste tu corazón, y
aunque ahora lo tienes hecho pedazos, te recuperaras y volverás a amar, pero no
a mi, no de la forma que yo te puedo amar.
¿Habrá sido buena idea dejarte?
Ahora empiezo a cuestionarme esa decisión, te veías tan frágil, estabas tan
vulnerable, y no hay otra cosa en el mundo que hubiera querido hacer en ese
momento que tomarte entre mis brazos y nunca soltarte, pero no podía hacerte eso, no podía hacerle
eso a mi corazón.
Me siento en una
encrucijada. Talvez podría regresar al
apartamento y seguir viviendo como si nunca hubiera recuperado mi memoria, pero
eso seria seguir alimentando una ilusión y talvez algún día tus sentimientos
hacia mi puedan cambiar, pero así como pueden resultar siendo lo que yo deseo,
también puede caerme como un balde de agua fría y alejarte para siempre; por
otra parte, esta mi deber hacia la familia, llevo tanto tiempo huyendo de esa
responsabilidad que todavía pienso que podría esperar a que “realmente” me
necesiten, la tía abuela ha hecho un buen trabajo como representante del
apellido, no veo el punto de regresar justo ahora… pero eso también puede
comprometer el bienestar de ella, podrían hacer lo que quisieran con su futuro…
no, no puedo seguir escondiéndome.
Los sueños duran tanto… incluso
cuando no estas donde quisieras estar, me pregunto ¿de qué estaríamos hablando
en este preciso momento? Probablemente
estarías corriendo como loca del baño a la habitación tratando de estar lista a
tiempo para ir a trabajar, y yo, viendo divertido tu frenesí, enamorándome cada
vez mas de cada pequeño detalle de tu presencia; si, definitivamente tenia que dejarte.
Pude averiguar que fue lo que
sucedió entre ustedes; no creo que las circunstancias hayan sido las mejores, y
tampoco me gusto la decisión que tomaron, talvez si hubieras sabido quien era
yo, hubieras recurrido a mi en busca de
consejo, de ayuda, pero eres tan obstinada! Creo que nada de lo que hubiera
dicho podía cambiar tu opinión; y el!! Te dejo ir muy fácilmente, ¿Por qué no
te dijo nada del accidente antes que viajaras? Talvez hubiera sido menos
doloroso… ibas tan ilusionada y regresaste despedazada… no, no puedo
cuestionarlo, no se que pasaba por su cabeza en ese instante y tampoco se lo
que siente su corazón ahora, pero de algo estoy seguro, la amaba mucho, aun la
ama, lo se.
Solo me queda una cosa por hacer:
tratare de reunirlos una ultima vez; se que son el uno para el otro, pero no
quiero forzar nada, le mandare una carta diciéndole que estoy en este
pueblo, estoy seguro que vendrá a buscarme,
pero quiero que lo encuentre a el,
quiero que se den una oportunidad mas,
espero que esta vez sigan a sus corazones y tomen la decisión correcta. Pero,
y si no es así? Si hablan y quedan en lo mismo, podré hacer algo mas por
ella?... o por mi?
Esperar. Solo me queda esperar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario